Un invernadero es un espacio que garantiza el perfecto desarrollo de las plantas durante todo el año, más allá de las inclemencias meteorológicas. Tenerlo cuidado y bien mantenido es vital para que el invernadero cumpla sus funciones. Esto no es, monto el invernadero, cuido la plantación y listo ¡NO! El invernadero hay que cuidarlo también y te vamos a contar cómo ¡Toma nota!
Cuidados básicos para un invernadero
Para mantener un invernadero en condiciones óptimas para que cumpla sus funciones, hay que tener en cuenta ciertas cosas para su mantenimiento:
- Siempre que sea posible debemos orientar el invernadero de Este a Oeste para aprovechar al máximo la luz natural. Además deberemos evitar las sombras de los árboles y de los edificios para garantizar así el correcto cultivo.
- La cubierta exterior debe limpiarse de vez en cuando del polvo y la suciedad que pueda caerle, ya que si está sucio dará sombra a nuestro cultivo y además tiene más posibilidad de que sufra daños. Por eso, limpiarlo de vez en cuando es algo necesario.
- En épocas en la que la temperatura sea alta, como pasa en verano, podemos recurrir a mallas de sombra. Estas mallas de sombra se colocan por encima del invernadero rebajando así la temperatura interior del mismo sin eliminar por completo la iluminación.
- La temperatura mínima de un invernadero debe estar entre los 10 y 15 grados, mientras que la máxima debe ser de 30º. Además, las temperaturas diurnas y nocturnas deben tener una diferencia de 5 o 7 grados.
Por tanto, si sigues estas recomendaciones lograrás mantener tu invernadero y tu cultivo en perfectas condiciones sin tener por qué sufrir ningún tipo de daño ni en el plástico ni en la estructura del mismo. Además podrás mantener sin problemas la temperatura ideal siempre y cuando sigas estas recomendaciones.